Devocional
Y se le apareció un ángel del Señor puesto en pie a la derecha del altar del incienso. Y se turbó Zacarías al verle, y le sobrecogió temor. Lucas 11-12
Ayer estuvimos estudiando que Zacarías tenía el privilegio de ministrar en el Lugar Santo, donde estaba el altar del incienso, el verso 11 nos dice que en ese lugar se le apareció un ángel del Señor. Podemos ver cómo Lucas hace una descripción específica cuando menciona que, el ángel que se le apareció a la derecha del altar del incienso.
La palabra ángel significa “enviado, mensajero,” también se puede decir “enviado por Dios” para que ejerza el ministerio que se le confía.
Cuando leí este verso, vino a mi mente que, al dedicarme a servir al Señor, debo hacerlo con diligencia, para que Dios me dé privilegios extraordinarios en mi vida.
La reacción de Zacarías creo que fue muy normal, Reina Valera dice “le sobrecogió temor.” La Nueva Traducción Viviente dice “lo vio, se alarmó y se llenó de temor.” Y la Traducción en Lenguaje Actual dice “tuvo mucho miedo y no supo qué hacer.”
En la Biblia encontramos muchos casos cuando Dios envía a Sus ángeles a cumplir tareas específicas, pero también para ayudar a los servidores de Él.
Por ejemplo, en el Antiguo Testamento, en Génesis 18, un ángel llega a anunciar el nacimiento de Isaac, y también para anunciar la destrucción de Sodoma y Gomorra. En el Nuevo Testamento, como lo leemos en Lucas, el anuncio del nacimiento de Juan, el anuncio de nuestro Señor Jesucristo.
Aplicación
El ministrar y servir a nuestro Dios nos trae privilegios extraordinarios “No os olvidéis de la hospitalidad, porque por ella algunos, sin saberlo, hospedaron ángeles.” Hebreos 13:2
Oración
Padre, gracias porque cada uno de nosotros tenemos el privilegio de servirte, amén.
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