Devocional:
El justo no será removido jamás; pero los impíos no habitarán la tierra. Proverbios 10:30
Estamos iniciando la última semana del mes de septiembre, el año sigue avanzando y nosotros, como hijos de Dios, estamos agradecidos por la vida que Él nos concede. Siempre disfrutamos de Su cuidado.
En este verso el escritor nos presenta, una contraposición entre el justo y el impío. La versión Reina Valera nos dice “El justo no será removido jamás; pero los impíos no habitarán la tierra.” La Nueva Traducción Viviente dice “Los justos nunca serán perturbados, pero los perversos serán quitados de la tierra.”
Las versiones que hemos leído dicen que el justo no será removido, perturbado. El significado de perturbar es: alterar o trastornar, producir desorden, inquietud, en algo o en alguien y aún emplearse en el sentido de perder la razón o el juicio.
Me llamó la atención el significado de perturbar, debido a que, aún como hijos de Dios, podemos estar pasando situaciones que pueden venir a nuestra vida, produciendo intranquilidad y pueden perturbar la paz que Dios nos ha dado.
Cuando vemos que el Fruto del Espíritu Santo es: amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, mansedumbre, fe y templanza (Gálatas 5:22-23); y que Dios no nos ha dado espíritu de cobardía, sino de amor, poder y de dominio propio (2 Timoteo 1:7). Las dos palabras que quiero resaltar de estos dos versículos son: templanza y dominio propio que podemos decir que es: la capacidad que Dios nos da a través del Espíritu Santo para poder enfrentar cualquier situación en nuestra vida. Esto quiere decir que, siempre tiene que ver en la manera que dejo que dejo que el Espíritu Santo me controle.
Es por esa razón que el verso dice: “El justo no será removido o perturbado.”
Aplicación
Confiemos en Dios, y dependamos del Espíritu Santo para que nuestra vida no sea perturbada.
Oración
Padre, gracias porque tienes cuidado de mi vida, amén.