Devocional:
Haciendo estar atento tu oído a la sabiduría; si inclinares tu corazón a la prudencia, Proverbios 2:2
En este verso también encontramos 2 cosas que el padre le pide a su hijo que haga, y por ende lo que Dios nos pide que hagamos. Veamos la primera “haciendo estar atento tu oído a la sabiduría”. Primero, veremos el significado de la palabra “haciendo”, es la forma de gerundio del verbo hacer. Significa: crear o producir algo, realizar o ejecutar una acción. Ahora bien, los gerundios son verboides que se caracterizan por señalar que la acción se está llevando a cabo. En esta parte del verso, el padre le pide a su hijo a mantener la acción de estar atento el oído a la sabiduría. “Estar atento” significa que pone atención en lo que hace, o que escucha o mira.
Podríamos hacer una aplicación, que tengamos cuidado con lo que oímos, ya que el consejo de Dios es que oigamos sabiduría y que nuestros oídos se mantengan atentos a ella.
Luego, en la segunda parte del verso 2, se nos pide “inclinar el corazón a la prudencia”. La primera palabra “inclinar” puede significar desviar una cosa de su posición habitual, influir a una persona para que diga o haga algo determinado. Bíblicamente puede significar inclinarse o agacharse, doblegarse, y lo que debe inclinarse o doblegarse es el corazón, que tenga una actitud humilde reconociendo que necesita hacer lo que se le pide y en esta parte en especial, que doblegue su corazón a la prudencia. Prudencia significa la capacidad de pensar ante ciertos acontecimientos o actividades, sobre los riesgos posibles que estos conllevan y adecuar o modificar la conducta para no recibir o producir perjuicios innecesarios.
Aplicación: Que con la ayuda de Dios podamos tener nuestro oído atento a la sabiduría y que nuestro corazón se doblegue a la prudencia.
Oración: Padre, dame un corazón humilde, que se someta a tu sabiduría y prudencia, amén.
Comments