Devocional:
Porque yo también fui hijo de mi padre, delicado y único delante de mi madre. Proverbios 4:3
Este verso nos presenta nos presenta una hermosa experiencia, que nos comunica el escritor del recuerdo que tiene de sus padres. Yo sé que algunos no pueden tener buenos recuerdos de sus padres, por diferentes situaciones que vivieron en sus hogares, pero espero que, con la ayuda de Dios, hayan podido sobrepasar esa situación y la que obra del Espíritu Santo haya sanado sus corazones.
En este verso vemos cómo el escritor puede recordar, en primer lugar, diciendo que se sintió hijo de su padre, o sea que pudo disfrutar como hijo la bendición de tener a un padre con el cual pudo tener esa hermosa relación de ser hijo, donde el padre pudo cumplir esa responsabilidad de tener cuidado de él.
Luego menciona también su relación con su madre, donde él se sentía “delicado y único delante de ella”.
La Nueva traducción Viviente presenta este verso de la siguiente forma “Pues yo, igual que ustedes, fui hijo de mi padre, amado tiernamente como el hijo único de mi madre.” La expresión que quiero resaltar es la que dice “amado tiernamente.”
Aplicación: Nuestra responsabilidad como padres (papá y mamá) es que nuestros hijos puedan sentirse amados, y en un futuro poder recordar como el escritor de Proverbios cómo sus padres le hicieron sentir la bendición del cuidado y el amor para él. El mensaje para nosotros es, que nuestros hijos puedan sentir que los amamos.
Oración: Padre, ayúdanos a transmitir ese amor a nuestros hijos, para que ellos puedan tener un buen recuerdo nuestro, amén.
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